Las investigaciones realizadas por la Policía Científica de la provincia, por orden de la jueza de Instrucción N°1, María L. Rodríguez, confirmaron que la misma arma semiautomática calibre 9 mm fue utilizada en los asesinatos del suboficial Mauricio Miñarro y de Silvio “Patrón” Saucedo.
Ambos crímenes, ocurridos el 30 de diciembre y el 15 de marzo respectivamente, dejaron pistas balísticas coincidentes. Las pericias realizadas a los casquillos encontrados en ambas escenas dieron resultado positivo, lo que confirmó que los proyectiles fueron disparados desde el mismo arma.
El primer caso se registró en el aeroclub de Eldorado, donde Miñarro fue asesinado en un aparente ataque planificado. En el lugar, además, desaparecieron nueve armas largas del destacamento. Por este hecho fue detenido un hombre de 35 años, sospechado de haber realizado tareas de inteligencia previas al crimen. Este sujeto, con antecedentes vinculados al contrabando en la zona de la triple frontera, fue excarcelado bajo caución real el 15 de abril, aunque continúa vinculado a la causa.
El segundo hecho ocurrió en el kilómetro 6 de Eldorado, donde Silvio Saucedo, reconocido comerciante y gomero de la ciudad, fue ejecutado de dos disparos frente a su taller en horas de la noche. A dos meses del crimen, la justicia local ya identificó a un sospechoso sobre quien pesa una orden de captura internacional emitida por Interpol y el Sistema Federal de Comunicaciones Policiales (SIFCOP).
Las investigaciones de la Dirección de Homicidios de la provincia apuntan a que ambos casos están relacionados, ya que comparten no solo el arma homicida sino también posibles vínculos criminales detrás de ambos ataques.