Debieron soportar durante ese tiempo sin poder descender debido a problemas técnicos en la aeronave que impedían apagar los motores. «Es una vergüenza que hayan permitido que el vuelo saliera de Buenos Aires», se quejó uno de los damnificados.
Una situación tan incómoda como inesperada vivieron los pasajeros que poco después de este mediodía arribaron al aeropuerto de Posadas, desde Buenos Aires, en un vuelo de JetSmart. Debieron soportar alrededor de una hora sin poder descender debido a problemas técnicos en la aeronave que impedían apagar los motores.
La situación tomó trascendencia pública a instancia de una serie de mensajes de audios y videos difundidos por usuarios del servicio y personas que se acercaron al aeropuerto para recibir a sus familiares en estos días de Semana Santa.
«Hay un vuelo de JetSmart al que no le están dejando bajar a los pasajeros, aparentemente no apagan los motores para que la gente descienda», explicó a grandes rasgos uno de los damnificados. «Es una vergüenza que hayan permitido que el vuelo saliera de Buenos Aires y no liberen a la gente acá», cerró.
Los videos difundidos muestran al avión detenido en el sector de descenso con los motores en marcha y las puertas cerradas. Ya fuera del perímetro muchas personas observando los movimientos en pista, soportando el sonido ensordecedor de las turbinas y aplaudiendo a la vez, a modo de reclamo para que a los pasajeros se les permitiera descender, lo que ocurrió casi una hora después del aterrizaje. El avión llegó a horario la capital de la provincia pero como consecuencia del desperfecto no podían abrir las puertas, por lo que los pasajeros estuvieron encerrados hasta que finalmente pudieron solucionar el problema y les permitieron descender.
De todas maneras esa aeronave, que debía regresar a Buenos Aires a las 13:30, no despegó por razones de seguridad y los pasajeros aún no recibieron información certera de lo que va a pasar con el vuelo, más allá del rumor de que otro avión estaría en camino. Eso no fue confirmado por lo que la incertidumbre caldea los ánimos en el aeropuerto posadeño. el territorio.